domingo, 16 de septiembre de 2012

Mi querida España...

A estas alturas habrá poca gente en España que no haya comentado - en el sentido que sea - acerca de la posible independencia de Catalunya, a raíz de la multitudinaria manifestación independentista del pasado 11 de septiembre en Barcelona.

Quizás para muchas personas no conocedoras de la realidad catalana les habrás sorprendido la capacidad de movilización que tiene actualmente el movimiento independentista catalán.

Creo sinceramente que se puede afirmar que el independentismo catalán está conquistando el centro político en Catalunya. Los catalanes hablan de la independencia abiertamente, sin ningún temor, con desparpajo... como se puede hablar de cualquier otro tema en una democracia consolidada como la nuestra.

Éste es el veritable éxito de la manifestación del pasado 11 de septiembre, ahora en los cafés, estaciones de tren, en la cola del supermercado, en las redes sociales... es fácil escuchar a gente de cualquier edad, escala social, nivel adquisitivo, origen, hablar - a favor o en contra - sobre la independencia. Nunca como ahora se ha hablado tanto sobre ello y con una naturalidad y civismo ejemplar.

Es evidente que este auge del independentismo es fruto, en buena parte aunque no exclusivamente, de la grave crisis económica que estamos sufriendo los españoles, catalanes también y muy especialmente.

Aunque algunos en Catalunya quieren cargar las culpas de esta situación exclusivamente al "enemigo principal que reside en Madrid", lo cierto es que, digo yo, alguna parte de la culpa también la tendremos nosotros los catalanes, ¿no?

Pero también es bien cierto que desde la reinstauración de la democracia que Catalunya aporta más dinero a las arcas del Estado que lo que recibe después de dicho Estado en transferencias o servicios públicos.

Sin embargo, ambas cosas son percepciones mías (y creo que de la mayoría de catalanes), si tuviéramos datos claros - en ambos casos - podríamos sacar nuestras propias conclusiones. Los ciudadanos catalanes (y los de cualquier otra comunidad española) somos suficientemente adultos para poder sacar conclusiones si se nos informa adecuadamente.

Quizás soy paranoico, pero creo que a muchos partidos políticos ya les interesa la actual situación por réditos electorales. Para ser exactos, creo que les interesaba hasta esta manifestación, ahora ven que han alimentado un problema de difícil solución.

El encaje de Catalunya dentro del Estado Español parece más difícil que nunca, y la independencia tampoco es una camino de rosas.

Sin embargo, hay una importante diferencia entre estas dos opciones, la segunda ilusiona a buena parte de la sociedad catalana.

En una época de fuerte crisis económica, crisis política, crisis de valores donde todos son noticias negativas, aportar ilusión es, como mínimo, encontrar agua en un desierto.

Ésta es la situación en Catalunya estos días.

En cambio, en el resto de España, y tal como tuiteó Andrés Nin después de la manifestación, se resucitan la confrontación entre las "Dos Españas":

No tengo ninguna duda que si la segunda España fuera predominante la manifestación del pasado 11 de septiembre no hubiera sido tan importante. Si España escuchara más (y Catalunya se explicara mejor) probablemente no hubiéramos llegado hasta aquí, en 3 décadas no se ha avanzado nada. Este es otro de los motivos principales que justifican la gran capacidad movilizadora de la manifestación independentista.

Tampoco tengo ninguna duda que la relación Catalunya - España ya no será como hasta ahora, el independentismo ha mostrado una fuerza enorme, los partidos políticos se han situado (algunos resituados) dada la situación.

Se ha producido un cambio de inflexión, una nueva época en la que nadie defiende el statu quo actual:
  • Parece que la vía de más autogobierno - pero siempre dentro del Estado Español - defendida históricamente por CiU ha desaparecido.
  • El PP propone una recentralización.
  • El PSC aboga por una vía alternativa, el federalismo, aunque ello es bastante complejo después del fallo del Tribunal Constitucional en contra de algunos puntos básicos del nuevo Estatuto de Catalunya, (éste es otro de los motivos de la gran multitud de personas manifestándose a favor de la independencia, muchos catalanes entendieron este fallo como la fín del proceso del autogobierno catalán dentro de España, si se quería más ya tenía que ser con un estado propio).
  • El resto de partidos catalanes están a favor de la independencia, excepto Ciutadans.
No sé cuál será el futuro, pero estoy convencido que será diferente de la situación actual.

Mientrastanto, nada mejor que escuchar a Cecilia en "Mi querida España":




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  • La imagen inicial de este post la he obtenido de aquí.

1 comentario:

Iñaki dijo...

Buena reflexión, Marc.