En 1860 el ingeniero Ildefons Cerdà presentó lo que él llamó "Proyecto de Reforma y Ensache de la ciudad de Barcelona", más conocido como el Plan Cerdà.
Un plan que, como su nombre indica, tenía por objetivo permitir el crecimiento urbanístico de la ciudad de Barcelona más allá de las murallas que la habían oprimido durante mucho tiempo.
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La aplicación de este plan se ha realizado a lo largo de estos últimos 150 años, los grandes cambios urbanísticos fruto de la XXV Olimpíada y del Fórum de las Culturas permitieron llevar la idea inicial de Cerdà hasta el mar y hasta levante.
Este período tan largo de aplicación demuestra la extraordinaria complejidad de este plan urbanístico, además, es un plan tan avanzado en la época que se ha integrado perfectamente a los importantes y revolucionarios cambios sociales que hemos tenido en este siglo y medio... especialmente en cuestiones de transporte.
Creo que no hace falta recordar que en el año 1860 no había vehículos motorizados, y la primera línea de tren de Barcelona (hasta Mataró) apenas tenía 12 años.
Consecuentemente, se puede afirmar con rotundidad que Ildefons Cerdà ideó un plan urbanístico tan avanzado, tan innovador, que ha sobrevivido a los radicales cambios que ha experimentado Barcelona.
Gracias al Plan Cerdà, con ideas tan sencillas e innovadoras como las manzanas ortogonales, y a otras iniciativas, la ciudad de Barcelona es un referente mundial en planificación urbanística.
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Pero quizás ahora, en pleno siglo XXI, sí que ya podemos empezar a afirmar que el Plan Cerdà no da más de sí, hay que repensar el urbanismo de las ciudades teniendo en cuenta los extraordinarios retos que tienen actualmente las ciudades (por ejemplo, según datos de la ONU, a finales de 2009 por primera vez la población mundial residente en ciudades fue superior a la residente en áreas rurales, y la tendencia es seguir aumentando la población urbana).
Ahora la planificación urbanística forma parte de un concepto mucho más grande, un concepto donde se mezclan muchas disciplinas: la gestión energética, la gestión de los residuos, la sostenibilidad, el medio ambiente, la redefinición de las administraciones públicas, el nuevo rol de la ciudadanía, las tecnologías de la información y comunicación (TIC), la movilidad, la financiación, etc.
Este concepto se ha bautizado como SmartCity (personalmente no me entusiasma este nombre, pero reconozco que es el que más se utiliza).
La semana que viene se celebrará en Barcelona la primera edición del SmartCityExpo, un congreso - más una zona de exposición - internacional de cuatro días de duración con la participación de los mejores expertos y empresas mundiales en este ámbito.
Barcelona vuelve a liderar la innovación en el urbanismo, pero ahora, quiere ir más allá, Barcelona quiere liderar la innovación en la gestión de las ciudades.
¿Te perderás este congreso?, Yo no :)
Enlaces relacionados:
- SmartCityExpo. Fira de Barcelona.
- SmartCity. Wikipedia.
- Plan Cerdà. Wikipedia.
- Ildefons Cerdà. Wikipedia.
- Smart Fun Cities. Marc Garriga.
- La imagen inicial de este post proviene de Wikimedia Commons.
- La segunda imagen también proviene de Wikimedia Commons.
- Versión original de este post en catalán en el blog Brou Casolà.
- Versión de este post en el blog Caldo Casero.
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