Hace unos días, la Red de Innovación Pública (XiP) me publicó un post relacionando el concepto de gobierno abierto y lo que está reclamando el colectivo de indignados que estos últimos días están acampados en toda España.
Os transcribo aquí el contenido de dicho post después de traducirlo al español, (la imagen es de David R. Jordan).
Estamos viviendo unos momentos de cambio, el movimiento de los llamados "indignados" (nacido de las manifestaciones del 15 de mayo en toda España) no es una protesta más, las acampadas que se derivan certifican que esto es algo más que una manifestación, de hecho, lo que estamos es ante una transformación de la sociedad, el tiempo nos dirá si es una leve modificación de la sociedad o un cambio radical.
Todavía es prematuro extraer conclusiones definitivas, los acontecimientos se suceden en una velocidad de vértigo, lo que ayer parecía era imposible hoy ya es una realidad.
Sin embargo, poco a poco se van obteniendo documentos resultantes de las deliberaciones en las asambleas, uno ha sido este documento de mínimos.
Es un breve documento donde se exponen los 3 principios que - según este colectivo - deberían ser las líneas principales de las primeras acciones que hay que modificar:Fijaros que los dos últimos están íntimamente ligados a los conceptos de Gobierno Abierto y de Datos Abiertos.
- Reforma de la ley electoral.
- Democracia participativa.
- Intolerancia a la corrupción y transparencia gubernamental.
El gobierno abierto - en inglés "Open Government" o simplemente "oGov" - es una nueva manera de entender la relación de la Administración hacia la ciudadanía, el resto de administraciones públicas y las otras organizaciones de la sociedad (incluyendo las empresas).
Un gobierno abierto está basado en 3 ejes principales:
- Transparencia.
- Participación.
- Colaboración.
Transparencia dado que un gobierno abierto proporciona todos sus datos públicos - los que no están sujetos a ningún freno legislativo o técnico que lo impida - al alcance de toda la sociedad y, además, fomentando su reutilización.
Dicho de otra manera, un gobierno abierto dispone sus datos mediante un portal de datos abiertos, (aquí tenéis los enlaces de los portales de datos abiertos de la Generalitat de Catalunya y del Ayuntamiento de Barcelona).
A nadie se le escapa que si se abren los datos relacionados con la licitación de contratos públicos estamos luchando contra la corrupción...
Participación con el objetivo de que la ciudadanía debata las acciones que hace el gobierno, esto incluye también las leyes; actualmente - y gracias a las TIC - éstas ya pueden ser criticadas, comentadas, modificadas, complementadas por parte de la ciudadanía antes de que se legislen definitivamente. De hecho, la propia ciudadanía puede realizar sus aportaciones para que el gobierno las discuta y valore.
Pero para llegar a esta situación, es imprescindible el primer eje, la transparencia. Si no informamos al ciudadano éste no podrá participar adecuadamente, no se podrá implicar en el gobierno de su ciudad, de su país.
Colaboración para conseguir esta implicación de la que hablábamos ahora. El gobierno debe ser humilde, debe situarse al mismo nivel que la ciudadanía (como dice Antoni Gutiérrez-Rubí: hay que bajar a la plaza). La ciudadanía, el gobierno, conjuntamente con el resto de actores, pueden y deben colaborar y construir una mejor sociedad con la ayuda de todos, no es una quimera, es factible.
En conclusión, buena parte de lo que reclaman los ciudadanos que actualmente están acampados (y los que simpatizan) tiene una manera de concretarse, una manera de realizarse: aplicando una política de Gobierno Abierto.
En el fondo, el objetivo último de un Gobierno Abierto es posibilitar la finalidad máxima de una democracia: un gobierno hecho por todos y para todos, un mensaje muy similar al que se está escuchando estos días en muchas plazas de toda España.
Enlaces relacionados:
- De les acampades al govern obert. Marc Garriga en el blog de la XiP, (en catalán).
- Xarxa d'Innovació Pública, (en catalán).
- Presidente, baje a la plaza. Antoni Gutiérrez-Rubí.
2 comentarios:
El verdadero gobierno abierto es el que se diseñe desde la ciudadanía y no desde las administraciones. Por eso me parece muy interesante que la sociedad esté reclamando mayores cauces de participación, dado que los políticos no están cambiando las cosas.
José Antonio,
Efectivamente el gobierno abierto comporta una alta implicación de la ciudadanía, no un mero pasivo como está siendo ahora.
Los políticos no les interesa (en general) cambiar este status quo. Unos no quieren cambiar por su ideología en contra, otros están demasiado preocupados por su futuro personal como para dedicarse al futuro de su país.
En resumen, estos últimos movimientos de la ciudadanía que reclaman más cuota de participación ha pillado a los políticos a contrapié... veremos con el tiempo si saben estar a la altura o no.
Gracias por pasarte por aquí :)
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