(Aquí teniu disponible el post original escrit en català)
Hace un mes que la
Generalitat de Catalunya publicó la "
Guía de usos y estilo a las redes sociales", un excelente trabajo que intenta poner un poco de cordura en cómo las administraciones públicas deben introducirse en el ámbito de las redes sociales.
Uno de los aspectos que generó una cierta controversia fue la gestión de los idiomas en el mundo de las redes sociales.
De entrada hay que tener en cuenta que la mayoría de las redes sociales han sido creadas en países anglosajones (básicamente en Estados Unidos) donde hay una muy baja predisposición para pensar, y hacer, herramientas preparadas para ser utilizadas en varios idiomas, (aparte del inglés, of course!).
Pero aquí, en Catalunya, tenemos el problema de tener dos lenguas co-oficiales y, además, el inglés por ser el idioma
de facto de la humanidad.
Todo ello hace que la mayoría de administraciones públicas catalanas hayan optado por tener varias versiones de sus 'webs oficiales': mayoritariamente en catalán siempre, en español la mayoría de veces (especialmente en aquellas administraciones suficientemente grandes como para poder mantener dos versiones de la web) y en inglés (pero no todos los contenidos y, además, especialmente para todo lo relacionado con el turismo).
Por lo tanto, en el ámbito de las webs parece que este problema lingüístico está resuelto, al menos, se ha llegado a una solución más o menos aceptada por todos.
Pero, ¿como gestionamos esta multilingüismo en las
redes sociales?
Como os comentaba, las herramientas del ámbito de las TICs suelen estar pensadas para ser usadas por una sola lengua, habitualmente el inglés, las redes sociales también tienen este "defecto".
Aunque es cierto que no hay ningún problema en utilizar otros idiomas, como por ejemplo el catalán o el español, sí tenemos problemas cuando intentamos hacer uso de varias lenguas a la vez.
Algunas organizaciones, sobre todo del ámbito privado, han solucionado este problema ofreciendo su presencia en las redes sociales en un solo idioma, pero esta solución no la pueden aplicar - genéricamente - las administraciones públicas que deben realizar su comunicación como mínimo en las lenguas oficiales - en nuestro caso en catalán y en español - y en muchos casos también en inglés por el público internacional.
En este documento se aportan 3 ejemplos de las estrategias que han seguido algunas administraciones públicas en este sentido.
Al final del
post os indico cual es, a mi entender, la estrategia lingüística a seguir.